Como tejer una túnica, aunque en esta foto de primera hora de la mañana nos veréis montando los hilos en las ponderas, a última hora de la tarde ya teníamos casi un lienzo entero.
Mientras tanto Similce ha comenzado a moler el grano para poder fabricar luego el pan ácimo para la comida.
Edereta está fabricando alguna pieza de cerámica que luego cocerá en el horno que montarán nuestros vecinos los ceramistas.
Korbis, nuestro caudillo, aprovechó para entrenar con uno de los soldados de su escolta para estar en forma en la batalla.
A mitad de la mañana y al final de la tarde intercambiamos mercancías con unos griegos que estaban instalados junto a nuestro campamento, y no nos fue nada mal la verdad, conseguimos suaves telas y vino.
Tras el último intercambio comercial nos volvimos para Osicerda después de haber disfrutado de un buen día en Salduie.
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